Arquímedes Oramas llegará como delegado del PRI en Puebla

La gran pregunta que hoy se hacen los priistas estriba sobre si hay o no acuerdos entre el PRI nacional y el gobernador Moreno Valle.

Para nadie es un secreto que en la elección federal de 2012, en medio de la sucesión presidencial en donde Enrique Peña Nieto siempre se mantuvo al frente de las preferencias electorales, el Señor de los Cerros echó a andar la maquinaria para cumplir con acuerdos, en donde se privilegiaron los intereses del PRI y PAN, para lograr cumplir con cuotas establecidas en las mesas nacionales.

Para nadie es un secreto que en la noche de la elección de 2012, muchas cosas sucedieron, al grado de que en Puebla, el PRI ganó el mayor número de diputaciones federales, mientras que el PAN se llevó las de la capital, pese a que hasta la media noche los márgenes del PREP marcaban amplias ventajas en favor de los candidatos del PRD.

Fueron tan burdos, que mientras en PRI se quedó con la mayoría de los distritos y el PAN con los restantes, el PRD no ganó una sola diputación, pese a que en los números globales Andrés Manuel López Obrador obtuvo más votos que Peña Nieto.

¡Qué alguien me explique!

En esa lógica, priistas y panistas esperan desesperados la “pinche señal”, para saber si hay negociación o no entre Los Pinos y Casa Puebla.

Debo decir que hasta ahora, todo hace pensar que la guerra está cantada y que hasta el momento no hay tregua ni cuartel.

La primera muestra de que no habría acuerdos, fue la negación de entregarle la candidatura por Ciudad Serdán a Fernando Morales, pese a que detrás de él estaba la aprobación morenovallista.

Otro dato, fue mandar a una candidata muy cercana a Peña Nieto como Nancy de la Sierra por Teziutlán, en donde compite con uno de los consentidos del gobernador.

Otro ejemplo es ver a Alejandro Armenta en Tepeaca, quien debió renunciar a un cargo de relevancia nacional como lo es el Instituto Nacional de Población, para competir en contra de uno de los delfines del mandamás poblano.

Sin embargo, al final de la historia, todas esas piezas son claramente negociables, si es que en las altas esferas nacionales se llegan a acuerdos.

Entre las necesidades de Peña están la de aumentar el número de diputados a modo y el pragmatismo de Moreno Valle, es evidente que ambos pueden sacrificar al que sea.

No es fácil leer entrelíneas, cuando los mensajes son muy sencillos de borrar.

Quizá, el hecho de llevar a Ricardo Henaine a la candidatura por el distrito 11 de la capital, sería la declaratoria de guerra que los priistas esperan; o si lo bajan de esa aspiración, podría ser la lectura que ya hubo acuerdos.

Por el momento, todo está en el aire, y será hasta hoy cuando salga humo blanco de la sede nacional del PRI, en donde también se revelará el nombre del poblano al que le otorguen la única diputación plurinominal, como parte de las cuotas a los estados.

Cambio de delegado especial en el PRI

En medio de los cambios previos a la elección de junio, se habla que en el CEN del PRI ya se plantea un cambio de delegado especial.

Un nuevo senador podría tomar las riendas en Puebla, vendría de Tabasco y su nombre es Arquímedes Oramas Vargas

En cualquier momento se podría confirmar la noticia.

http://intoleranciadiario.com/detalleOpinion/4256/contracara/en-espera-de-la-pinche-senal