Quién podría ser El Bronca en las elecciones para gobernador de Puebla

Por Status | Jueves, Mayo 21, 2015

Hay que seguir muy de cerca el fenómeno de El Bronco en Nuevo León.

Se trata de una propuesta ciudadana que ya puso contra la pared a los partidos, las estructuras del poder en esas regiones y, sobre todo, empieza a demostrar que sí hay vida después de los políticos tradicionales.

El triunfo ciudadano, una derrota a estas alturas parecerá un atentando a la democracia y podría despertar al México Bronco.

Si el modelo de El Bronco ha prendido al electorado (ojo se trata de proceso local, no federal) ¿por qué no una opción ciudadana para Puebla?

Creo que la entidad ya está lista para los candidatos independientes. La sociedad está cansada de todos los políticos tradicionales y partidos.

La pregunta es si habrá una figura ciudadana para disputar el 2016 o vendrá como tema de fondo en el 2018.

Creo que la segunda opción es la más sensata, pues no se fabrica una candidatura ciudadana desde el poder, sino por el contrario, se fortalece entre más alejada esté del gobierno y los partidos o establishment.

fernandezfont21Antes esa figura ciudadana provenía del sector empresarial, pero ante lo timorato del gremio en los últimos años, me parece que ese perfil podría surgir de la academia.

Ahí está la figura intachable de Fernando Fernández Font, a la que hay que empezar a ponerle marca personal. No veo otra personalidad.

En el 2018 está claro que se volverá a votar por un cambio en lo nacional y eso impactará en lo local. El PAN no se ve cómo pueda encarnar el cambio.

Como todos son iguales, entonces ahora se busca algo que marque la diferencia, y los ciudadanos representan esa alternativa.

La lucha anti establishment, donde en el ámbito federal el propio Andrés Manuel López Obrador podría capitalizar ese cambio, en el sentido de por qué no darle el voto de oportunidad.

El Bronco en Nuevo León destroza en cada mitin a las estructuras anquilosadas y corruptas del poder, pero sobre todo elimina al régimen de partidos y las mentadas alianzas.

Pensar hoy en un candidatura multipartidista para el 2018 podría ser un suicidio político, porque representan la expresión máxima del poder por el poder.

Más si el político pretende colocarse por encima de todos, incluyendo a los partidos.

La lógica del cambio del 2010 no es la misma que el 2018.

En el 2010 la coalición fue un vehículo al que se sumó la ciudadanía. Ahora lo que se ve es que la sociedad perdió la confianza.

Y una coalición solo se ve como un instrumento de políticos para llegar al poder.

Nuevo León, ooootra vez, marca la pauta.